A medida que termina el verano y las hojas comienzan a cambiar de color, la comunidad Amish se ocupa de muchas actividades para celebrar el final de la temporada y prepararse para los meses más fríos que se avecinan. Puede que esto no incluya las celebraciones tradicionales del Día del Trabajo, pero hay muchos eventos comunitarios involucrados.
Tiempo de cosecha: el final del verano es un momento muy ocupado para los agricultores amish porque es hora de recolectar todos los cultivos que han estado cultivando. Recolectan maíz, tomates, calabazas y otros cultivos de verano para comerlos frescos, enlatados o almacenados para el invierno. Es un momento para celebrar todas las bendiciones que la tierra les ha dado.
Reuniones comunitarias: después de la temporada de cosecha, la comunidad Amish se reúne para reuniones y celebraciones. Pueden ser bodas, levantamientos de graneros, colchas de abejas o comidas comunitarias. Estos eventos ayudan a fortalecer la comunidad y a disfrutar de la compañía de los demás antes de que llegue el invierno.
Preparándose para el invierno: El final del verano también significa que es hora de prepararse para el invierno. Los Amish cortan y almacenan leña, remendan o confeccionan ropa de invierno y preparan sus hogares para el frío. La comunidad se ayuda mutuamente con estos preparativos.
Comienza la escuela: para los niños amish, el final del verano significa el comienzo del año escolar. Las escuelas amish suelen comenzar después del Día del Trabajo y duran hasta finales de abril o principios de mayo.
Preservar la generosidad del verano: Enlatar y conservar alimentos son actividades importantes al final del verano. Las familias amish pasan mucho tiempo enlatando frutas y verduras, haciendo mermeladas y jaleas y encurtiendo pepinos y otras verduras. Estos alimentos en conserva se consumirán durante todo el invierno.
Reflexionando sobre la temporada: El final del verano también es un momento para pensar en la temporada pasada. Las familias amish se toman el tiempo para agradecer las bendiciones de la temporada y prepararse espiritualmente para el próximo invierno. A medida que se pone el sol del verano y comienzan a soplar los vientos frescos del otoño, la comunidad Amish agradece el cambio de estaciones y siente una sensación de logro. El final del verano no es sólo un momento para celebrar la cosecha, sino también un momento para unirnos como comunidad y prepararnos para lo que viene. ¡Haga clic para ver qué estamos haciendo para el Día del Trabajo!
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